En la selva de asfalto
los alacranes se hieren
la cola
Las banquetas
beben sangre.
Lomas Taurinas
teatro de la última faena
¡Rabo y orejas!
El escorpión con saña
da un certero piquete
y el Coloso cae.
Cae su lucha,
su palabra
Armas de salva
Mientras la hiena
festeja su hazaña
La viuda
llora por sus hilos.
¿äuién mecerá
a sus hijos?
¿Qué les dirá cuando pergunten?
La ciudad repica
dolorida...
— Quizá por sus muertos —
Un saxofón les brinda una plegaria.
La eternidad todo lo juzga.
¡Sólo Dios pudo detener esa mano!