Deberías sacarte esa ropa negra y ponerte un traje
claro y una corbata celeste.
¿Quieres que te compre un traje?
Deberías cortarte el pelo y quitarte la caravana.
¿Quieres que te corte el pelo?
Pero yo soy un poeta, nena.
Cállate, pareces un personaje salido de Monte María.
Abrí la puerta y me fui.
No nací para traidor.
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