Cada día que comienza tengo el deseo profundo
de saber de ti.
De saber si te podré encontrar en el dulce
querer del Sol que nos alumbra
al mismo tiempo, aunque las distancias pretendan
separar nuestros caminos.
De saber si el rayo de Luna te ilumina esa noche
como a mi.
De saber si el azul cielo te observa como a mi
figura desde lejos...
De saber si hoy escucharé tu voz de miel
entremetiéndose en mi cuerpo tan profundo
como no lo imaginas.
De saber si las horas llegan al momento del encuentro
fuerte y feroz,
inclinado a un amor eterno.
Silvana Barrales