BREVE DICCIONARIO DE LA POESIA EXPERIMENTAL LATINOAMERICANA
por Clemente Padin
LA POESIA INTERSIGNOS
La Poesía Intersignos propuesta por el poeta brasileño Philadelpho Menezes en 1980 culmina el proceso experimental que se inició con la Poesía Concreta brasileña en 1956 continuado con el poema semiótico (1964) y el Poema/Proceso (1967).
Al igual que el Poema/Proceso, la Poesía Intersignos propone "retirar del signo verbal la exclusividad en la exploración de la materia prima poética" (Menezes,1987). Para Wlademir Dias-Pino, la palabra es el signo de uno de los lenguajes que puede ser utilizado en la expresión poética, pero no el único ni el excluyente: "...el Poema/Proceso no pretende terminar con la palabra...lo que el Poema/Proceso reafirma es que el poema se hace con el proceso y no con palabras..." (Wlademir Dias-Pino, 1971).
Según Menezes, se puede "definir sumariamente a la Poesía Intersignos como aquella en los que los signos visuales y verbales, cada cual con su carga semántica propia, actúan conjuntamente en la producción del sentido del poema" (Philadelpho Menezes, 1987). Así, marca sus diferencias con la llamada "Poesía Visual" que se vale de la dimensión plástica del lenguaje (el lenguaje no sólo se "lee" sino que, además, se "ve"). Sostiene que en el poema visual los elementos plásticos no se integran al significado total del poema sino que actúan como elementos de confusión, de "ruido" para generar la mayor ambigüedad posible. También pueden estar en función de relevamiento o de refuerzo de la expresión verbal, redundándola, a la manera de los poemas ilustrados o los "carmina figurata" latinos o los "Pattern Poems" como los define Dick Higgins (1987) en donde las dos formas de expresión, la verbal y la visual, pueden separarse sin mengua de información poética, lo cual es imposible en el poema intersigno. Menezes retoma el testimonio de la poesía concreta histórica: la construcción racional de los signos interactuando en la conformación del sentido, mediante procesos compositivos "precisos", casi esquemáticos, al contrario de las tendencias más relevantes de la poesía visual, oriundas del collage y de la diseminación semántica.
Posteriormente en ROTEIRO DE LEITURA: POESIA CONCRETA E VISUAL, 1998, al caracterizar a la Poesía Visual, habla de que, fundamentalmente, existen tres manifestaciones: el poema-embalaje, el poema-collage y el poema-montaje. El poema-embalaje se caracteriza por una vuelta al texto y al verso aunque, debido a las sofisticadas posibilidades de los nuevos tipos gráficos y otros recursos, es posible hablar, aún, de integración expresiva en la visualidad. El poema-collage, tiene su origen en la técnica artística descubierta por el Cubismo que sacaba a los signos de su ambiente habitual y lo colocaba en otros generando ambigüedad y proliferación de sentidos. El poema-montaje, al contrario del poema-collage, al reunir dos signos de diferentes lenguajes no generaría múltiples representaciones sino una o dos representaciones en la mente del "lector". "Se crea una articulación formal entre verbalidad, visualidad y sonoridad que produciría un montaje superconductor en donde la comunicación exigiría del observador un integral aprovechamiento de los sentidos, en función de la decodificación de la hipótesis de lectura del poema".
A nadie escapa que esa integración (lo visual, lo verbal y lo sonoro que tan bien expresara James Joyce con su concepto de "verbivocovisual") sólo sería posible en el futuro cercano a través de los descubrimientos de la técnica, es decir, el video y, sobre todo, la multimedia.
Philadelpho Menezes